Para hablar de gestión del conocimiento e información
se debe iniciar por decir que Balhondo (2010) “el conocimiento es el hecho de
saber, conocer o dominar determinada actividad, situación, tarea, fenómeno
entre otros” conforme a la información, cultura, creencias que se posean en un
ambiente determinado de individuos (Pág. 4), para él la información es “un conjunto organizado de datos
procesados, que constituyen un mensaje que cambia el estado de conocimiento del
sujeto o sistema que recibe dicho mensaje” (Pág. 48).
Por
su parte para la Organización de las Naciones Unidas, la gestión del
conocimiento es “Capacidad colectiva para adquirir y crear conocimiento y
ponerlo a un uso productivo para el bien común (…), para Balhondo es (Ob Cit)
“La acción concertada para profundizar la comprensión y para gestionar y
compartir conocimiento mucho más útil.”
Bajo los conceptos antes estudiados se podría afirmar
entonces que la gestión del conocimiento como el proceso cognitivos que
confirma, experimenta, y contextualiza al conocedor sobre el objeto por conocer,
lo cual está condicionado por el entorno, que luego serán potenciadas
sistematizadas por las capacidades del que busca el conocimiento generando así
la acción subjetiva objetiva y la generación del valor.
Se puede entonces concluir que la gestión del conocimiento
inicia en la recolección de los datos que son llamados información para en base
a esto generar nueva comunicación que agrega valor al saber o cultura del
sujeto y modificación de cómo es descrito el objeto.
Leyendo
a Balhondo se puede decir que la información es el estado de conocimiento que
el sujeto o sistema recibe dicho mensaje, entonces la información son datos que
al recibirlos cambian el conocimiento de quien los recibe, de aquí que podemos
decir que la información es el dato sin valor al menos aparente hasta que el
sujeto lo interpreta y le da utilidad, de aquí su diferencia fundamental la
información es por decirlo de alguna forma la materia prima del saber mientras
que el conocimiento es la gestión del mismo por el sujeto.
Para
Giner (2004) “El termino sociedad de la información o sociedad del conocimiento
es un término que ha sido generalmente aceptado y ha referencia a un concepto
de cambio o de ruptura con la etapa anterior, la denominada sociedad
industrial” (Pág. 03). Otra noción alternativa es el término “sociedad en red”,
noción promovida por Castells citado por Giner, el cual es un concepto que está
situado entre la ‘sociedad de la información’ y la ‘sociedad del conocimiento’.
Castells marca diferencias respecto a la ‘sociedad de la información’,
distinguiendo entre información e informacional.
Para
él información, es decir comunicación del conocimiento, ha sido, “fundamental
en todas las sociedades (…); mientras que el término informacional indica el atributo de
una forma específica de organización social en la que la generación, el
procesamiento y la transmisión de la información se convierten en las fuentes
fundamentales de la productividad y el poder, debido a las nuevas condiciones
tecnológicas que surgen en este periodo histórico” (Castells 1996).
En
este orden de ideas, existen diversas teorías sobre el conocimiento
organizacional y sus alcances, para los autores del Modelo Socialización,
Exteriorización, Combinación, Interiorización (SECI), Nonaka y Takeuchi citado por Riesco (2010) “Este modelo se
refiere a cómo las organizaciones logran que todos sus integrantes, sean
internos o externos, estructuren el conocimiento de tal modo que permita
generar una memoria” (Pág. 118)
Se
debe recordar que, existen dos formas de conocimiento: el explícito y el
tácito. El primero consiste en información estructurada que puede ser
codificada, normada y registrada como procedimientos, este puede ser
transmitido fácilmente de una a otra persona a través de correos electrónicos,
documentos, bases de datos, etc; mas el conocimiento tácito se compone de una
serie de elementos intangibles que muchas veces no se pueden expresar o
explicar, como la experiencia, las creencias, los valores, entre otros; para
Nonaka y Takeuchi, este compone aproximadamente el 75% del conocimiento
disponible en una organización", apuntó Riesco (Ob Cit).
Igualmente,
en este modelo de gestión es hacer un
circulo virtuoso donde el conocimiento tácito y explicito se fundan y nutran
uno del otro, los autores señalan que este se logra por el intercambio de
experiencias y modelos mentales, que permiten que el conocimiento tácito
(externo) se convierta en explicito (interno) a través de la combinación por
medio de herramientas de intercambio de información, que permiten de forma
interna su uso en las labores de la organización.
Finalmente
se puede indicar acerca de la gestión del conocimiento, aprendizaje
organizacional y las organizaciones
inteligentes son tres concepto que permiten a los entes trabaja como un todo integrado, que es capaz
de tejer permanentemente la habilidad de cambiar la esencia de su carácter;
tiene valores, hábitos, políticas, programas, sistemas y estructuras que apoyan
y aceleran el aprendizaje organizacional, y por ende la gestión del
conocimiento tanto empírico como epistémico. De allí que las características de
inteligente están en el manejo efectivo de su conocimiento, detección oportuna
de necesidades de mercado y por su capacidad de innovación, enseñanza y
aprendizaje, aunado a los sistemas de manejo de conocimiento que permitirán
lograr los propósitos, objetivos y metas, facilitando el trabajo colaborativo y
creativo de todos los miembros de la empresa.
Se
concluye entones que la gestión del conocimiento, el aprendizaje y capital intelectual en la
actualidad es uno de los motivadores de las organizaciones quienes han
comprendo que el saber (know how) del negocio es su principal capital, pero que
al ser este etero, intangible, inteligible, manejado por las personas,
almacenado en muchas partes y disponible para todos debe ser potenciado y
aprendido, nada fácil en sociedades de información donde cada una tiene su
peculiaridad.